lunes, 6 de noviembre de 2006

LA LUNA QUE SUEÑA

Las personas que soñamos a menudo nos llaman de todo, de no tocar de pies en la tierra, de ser utópicos, de vivir en un mundo que no nos pertenece. Y no es cierto. Quizás las personas que soñamos somos las que en realidad mantienen el mundo con ilusión, con esperanza, con inocencia, con ese ver el futuro menos oscuro. Sacrificamos demasiado seguramente, nuestra propia existencia es vista con unos ojos de desprecio, de incomprensión, por quién nos rodea, nos conoce, incluso por quién no ha tenido la suerte de dejarse tocar por nuestra aura de tranquilidad, de energía positiva que muchas personas no saben encontrar.

Vemos el mundo con otros ojos, de distinta manera, más divertido del que nos venden, del que nos imponen. Nos levantamos haciendo un esfuerzo de comernos el orgullo que nos arrebatan y nos acostamos contentos por haber podido ayudar a alguna persona, a su alma, de alguien que nos hemos cruzado o un amigo/a que nos ha pedido consejo, o simplemente hablar por hablar. Siempre hay algo bonito cuando me acuesto por la noche, algo por lo que el simple acto de abrir los ojos haya merecido la pena levantarse de la cama, aún sabiendo que el día será duro.

Ayer me acosté con frío, salí al balcón de mi casa que da a la montaña de Montserrat y encima de ella había la luna, muy cerca, grande, blanca, llena, y seguí los consejos de una amiga con la que hablaba en una conversación a tres en el Messenger. Me dijo que pidiera un deseo, de verdad, creyendo en ello, y se cumpliría. Así lo hice, esperando que en breve se cumpla. Espero tenga razón, no he pedido nada imposible, ni irreal, algo sencillo, algo que anhelo, algo que necesito.

Hoy me he levantado temprano y la luna seguía ahí, aunque el sol le daba las buenas noches para ella. Y le he dado las gracias por haberme escuchado ayer por la noche, por esos 10 minutos pasando frío, soñando despierto, viéndola como me miraba para ver si mi corazón era puro y digno de recibir mi deseo. No se hacerlo de otro modo, quizás tenga el corazón demasiado grande y esto me haga pasar factura más adelante, pero tengo claro que no voy a hundirme por nada ni por nadie. Y le prometo que siempre le seré fiel a la Luna, que la protegeré de aquellos que no creen en ella, y en su poder.

Una vez me hice una carta astral hace muchos años, no recuerdo que me decía, tampoco le di demasiada credibilidad en ese momento, pero recuerdo que según la posición de los astros en el día y la hora en la que nací, el Sol estaba en una punta y la Luna precisamente siguiendo una línea recta en la otra, por lo tanto estaban separados en los extremos. No sé que puede significar esto, pero lo que entiendo es que en mí día a día puedo disfrutar de todo, de las bondades del día y de la noche, de esa dualidad que mantiene unida la Galaxia, de ese poder que otorgan los sueños, en querer que se hagan realidad, en poder materializarlos, en poder hacer que en un futuro no muy lejano el resto de la gente vea el fantástico y maravilloso mundo tal y como lo vemos los soñadores, para que la gente se respete, se quiera sin pedir nada a cambio, y se pueda vivir en paz.

La gente que me conoce sabe muy bien la devoción que siento por los delfines, mi animal preferido con diferencia. Me despierta algo dentro de mi muy superior a muchas cosas, me reconforta su presencia, su sonido, su visión. Y justamente está mañana viendo las noticias mientras tomo el café salía un reportaje sobre unos científicos japoneses que han encontrado una especie de Delfín Molar que tiene aletas laterales traseras, lo cual sería la confirmación que hace 50 millones de años el delfín era un mamífero de cuatro patas terrestre que por algún motivo volvió al mar para adaptarse de nuevo a ese entorno acuático, pero manteniendo aquello que les hace precisamente ser mamíferos de agua salada.

Quizás necesitemos los humanos hacer ese proceso alguna que otra vez. Volver a las raíces, a los orígenes como seres para adaptarnos mejor al entorno actual, y sobrevivir con dignidad. Quizás sea en los sueños diarios dónde podamos purificar nuestros males, y convertirnos en delfines oníricos para mejorar día a día. Yo no pienso dejar de hacerlo, y si se quiere insultar, odiar, despreciarme o alejarme y mantenerme lejos será la elección de alguien libre pero que no quiere o acepta soñar.

A finales de semana cumplo años, una cifra que significa algo para medio planeta, un cambio, una metamorfosis, el sueño de algo que les superaba en su momento que aún hoy perdura. Tengo suerte de haber llegado a esa cifra, con la cabeza serena, el corazón tranquilo y el alma en paz. Sigo soñando, y lo haré siempre, ese es mi destino, ese mi carácter, y no pienso intentar huir de él nunca más.

Os recomiendo para la lectura de este artículo de hoy el tema principal de la BSO del film BIG FISH del compositor Danny Elfman. Una delicia de banda sonora y un mejor film, que nos devuelve esa capacidad de soñar que a veces perdemos por el camino cuando nos hacemos mayores.

9 comentarios:

Kaos dijo...

Creo que es una cuadratura, o están en oposición, pero seguro que un trígono no es.
Y si mi Ra dice que le pidas un deseo a la luna, da por hecho que ese deseo se cumple, que menuda es ella...

kss de una selenita

La Quinta Columna dijo...

Yo se lo pedí, se lo pedí para este mes, a ver si se cumple :)))
No he dudado nunca de tu palabra corazón. Ahh y explicame lo de la carta astral exactamente, si quieres (y la encuentro por casa) la busco y cuando nos veamos la traigo y me dices algo si lo sabes claro está... puedes ver mi futuro?? jajajaja cuenta cuenta
Nos vemos pronto wapa.

Kaos dijo...

Te perdonaré el error de confundirme con mi arpia favorita.

Puedo interpretar tu carta astral pero declino la responsabilidad por el contenido de la misma...

La Quinta Columna dijo...

¿Ha qué arpia te refieres?, yo no me dejo ver con este tipo de mujeres, las que conozco son un encanto, con personalidad, pero unos trozos de pan al fin y al cabo, para ir con gente capulla, me quedo con los/las del trabajo (no todos/as claro, con quién hablo sin que se me note la sonrisa fingida a lo concha velasco ya sabrán a quién me refiero xD.).

Acepto lo de la lectura de mi carta astral, pero antes te que bajar a mis mazmorras para rebuscar entre las cajas, los papeles comprometedores de mis notas de estudiante y dos pelis en super 8mm dónde se puede ver a Pedro J. Ramírez vestido de eslava con pinchos en los pezones y sodomizando a un cocodrilo.

por cierto, he visto tus blogs, y he reido por dentro, si lo hiciese por fuera ahora estaría con los pantalones mojados del líquido que el cuerpo no quiere pero retiene el muy cabrón.

Si puedes dame pistas (que es más divertido, y así meto la gamba)de quién se esconde detrás de KAOS lo de los 41 años y la selenita me despista y lo del Kss me despista más (que alguien con dos dedos de frente quiera besarme ya me parece un detalle de mal gusto, yo no lo haría. Besarme a mi mismo me refiero uaggssss que impresión -aunque bese bien cuando me dejan, y he llegado a quitar la ortodoncia dental de un lametón en un momento frénetico/frantic en inglés-.

En fin, que miraré de poner la foto de la niña esta del pelo largo en casa con el Photoshop al reves a ver si obtengo pistas a lo CSI.

Besos (espero que no lleves aparatos en los dientes jejejeje).

Kaos dijo...

Baja a las mazmorras o al inframundo, te concedo todo el tiempo que necesites para buscar tu carta astral y recabar pistas sobre mi persona. Si encuentras a Hécate, salúdala de mi parte.

Suelo vivir en esa Luna a la que le pides deseos, tal vez pueda interceder para que se te cumplan...

Si he provocado una sonrisa, lo prefiero a que tengas que meter los pantalones en ese engendro que centrifuga.

Comparado con la idea de besar a P.J. mientras sodomiza a un cocodrilo, mandarte besos, que no besarte, me parece peccata minuta.

La Quinta Columna dijo...

Buno, de momento tengo claro que en la mitología griega, Hécate era la diosa de la oscuridad e hija de los titanes Perses y Asteria. A diferencia de Ártemis, que representaba la luz lunar y el esplendor de la noche, Hécate representaba su oscuridad y sus terrores. Se creía que, en las noches sin luna, ella vagaba por la tierra con una jauría de perros fantasmales y aulladores. Era la diosa de la hechicería y lo arcano, y la veneraban especialmente magos y brujas, quienes le ofrecían en sacrificio corderos y perros negros. Como diosa de las encrucijadas, se creía que Hécate y su jauría de perros aparecían en esos espacios apartados, que eran para los viajeros lugares demoníacos y espectrales. El arte representa a Hécate a menudo con tres cuerpos o tres cabezas y con serpientes entrelazadas alrededor de su cuello. Pero aunque sepa todo esto, me despista aún más, y me aleja del objetivo final que es saber la identidad de quién se esconde bajo la cara de esa niña con el pelo negro y el gato detrás xD. Puedo intuir algo y mi sentido arácnido me hace la puñeta pero no quiero aventurarme aún más y dar un nombre sin haber recabado más pistas. Por eso te pide me facilites alguna más, así este divertido juego a lo CSI subirá de nivel i en tensión.
Ahh estoy buscando la carta astral, a ver si no despierto a nada que haya en las cajas y en la mazmorra :)))

Kaos dijo...

Exhaustiva documentación para un solo nombre.

Para solicitar más información, dirígete a Mnenósine, aunque desde que aprobó las oposiciones y se convirtió en funcionaria solo trabaja a días alternos.

Grissom, Horatio y Mac empezarían por repasar todos los papeles, claro que también puedes arriesgarte a lanzar una hipótesis al viento. Como no soy el genio de los deseos, dos ocasiones te daré.

La niña del pelo negro sabe cómo guardar secretos, únicamente habla con su gato y con seres del más allá.

La Quinta Columna dijo...

Vaya, tengo los ojos que me chirrían de tanto leer papeles. En fin, que sigo buscando y no la encuentro, lo haré pero como no haya pasado 50 veces por encima...
Necesito otra pista más para este engorroso rompecabezas. Sólo díme si me conoces realmente (por la foto no es muy difícil equivocarse xD), o en realidad no nos hemos visto en nuestra vida.

Kaos dijo...

Te he dado pistas, un club, la persona que te dijo que le pidieras el deseo a la luna... y por si fuera poco, un link a los viejos tiempos.

Nos habíamos visto infinidad de veces.